¿Es lícito alegrarse por un fracaso taquillero?, no juzguéis tan rápido que aquí se han leído comentarios deseando los peores males a directores, historias originales y secuelas. Os cuento: en el verano del 98, todo lo que quería era que ‘Godzilla’ se estrellase en el box-office.Por aquel entonces uno tenía que esperar al mes siguiente para saber si un film había logrado el nº1 en la taquilla USA, y en Junio de dicho año nos enterábamos que ‘Godzilla’, el siguiente trabajo del midas Roland Emmerich tras ‘Independence Day’, y con un presupuesto de 130 millones de dólares, equivalente a 200 de los de ahora, se daba un golpe tremendo en su primer fin de semana de exhibición.
Al final el film triunfó más fuera de los Estados Unidos (136 millones domésticos, otros 242 en el resto del mundo), pero ni se habló de secuela. A pesar de que ‘Godzilla’ resultó ser un entretenimiento digno (nada excepcional), mi odio ferviente al proyecto provenía , a priori, del rechazo absoluto que le tengo a Matthew Broderick, al que aborrezco como actor, y de remate, a posteriori, a su coprotagonista Maria Pitillo, que nos demostró que era nula para esto.
Ya me he desahogado, y me sirve para presentaros el nuevo ‘Godzilla’, cuyos derechos tiene ahora la productora de ‘Superman Returns’ y ‘The Dark Knight’ (antes los tenía la Sony) y que de la mano de la Warner Bros. sufrirá su propio reboot. El guión lo iba a escribir Dave Callaham (’Los Mercenarios’), que hasta entregó un borrador a la Warner, pero ahora lo hará el director con otro guionista por determinar.
Ese director no es el rumoreado Guillermo Del Toro (más quisieramos), es Gareth Edwards, británico y con su debut ‘Monsters’ como curriculum, sólo exhibido en nuestro país en el Festival de Sitges. Aparte de estrenarse en el 2012, más detalles no hay, ni de trama ni de intenciones. Bueno, lo de que será en 3D sobra decirlo.
Aplaudo que un proyecto de tal envergadura se le de a un director cuyo anterior trabajo se hizo por medio millón de dólares. Eso significa que habrá más ingenio que fuegos artificiales supercaros.
