Los cuentos de hadas de la factoría Disney llegarán a su final definitivo a largo plazo con el estreno de Enredados, según un interesante artículo publicado en Los Angeles Times, donde directores y creativos de la compañía hablan sobre su futuro.
Mañana miércoles 24 de noviembre se estrena en Estados Unidos y Canadá la producción animada número 50 de Walt Disney Pictures, Enredados (Tangled), una peculiar adaptación de Rapunzel de los hermanos Grimm, que no llegará a los cines españoles hasta febrero de 2011. Y todo parece indicar que, por fortuna o por desgracia, ésta será la última película de cuento de hadas que los estudios produzcan, al menos, en un plazo bastante largo de tiempo.
La factoría de Mickey Mouse está decidida a pasar página y cerrar el libro de los cuentos de hadas que tantos éxitos le han reportado, y que han sido una parte muy relevante en el legado de la animación Disney desde el estreno en 1937 de Blancanieves y los siete enanitos.
Edwin Catmull, actual presidente de Walt Disney Animation Studios y de Pixar Animation Studios, es quien afirma que no tienen en mente ningún proyecto que abarque un musical o un cuento de hadas como los de antaño, después de haber cancelado junto a John Lasseter (director creativo tanto de Disney como de Pixar) producciones por el estilo como The Snow Queen y Jack and the Beanstalk.
No parece una decisión justa para mentes nostálgicas, teniendo en cuenta que Disney le debe todo su imperio a este tipo de producciones: desde el merchandising disponible en jugueterías y tiendas oficiales, pasando por sus parques temáticos, hasta el logo corporativo de los estudios, protagonizado por el clásico castillo Disney bajo una lluvia de polvo de hadas.
Sin embargo, los resultados en taquilla de Tiana y el sapo, nada malos pero flojos en comparación con otras producciones igual de ambiciosas de la factoría, pueden haber provocado estas decisiones corporativas y artísticas, empezando por el renombramiento de Rapunzel con un título menos genérico como Enredados. Los tiempos han cambiado, y en tiempos de franquicias cinematográficas y películas con un target mucho más amplio, Disney debe reorganizar sus prioridades para la actual situación de la industria del cine.
Según Dafna Lemish, experta del papel de los medios en las vidas de los más pequeños, las preferencias del target mayoritario de Disney (niñas pequeñas) han cambiado radicalmente. Las princesas y el ideal romántico que representan ya son parte del pasado, a favor de un modelo de feminidad representado por ejemplos adolescentes como Selena Gomez, que por azares de la vida saltó a la fama gracias a Disney Channel. Las chicas de hoy en día ya no están interesadas en ser princesas, sino en ser atractivas y guays, que es lo que la sociedad fría de hoy en día valora –voluntaria o involuntariamente- en los medios.
Para muchos, se trata de evolucionar e ir con los tiempos que corren, o morir, ya que es imposible seguir vendiendo lo mismo con que padres y madres de hoy en día jugaban y consumían durante sus infancias.
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