Una azafata americana y un detective italiano luchan contra el tiempo para encontrar a la hermana de éste, secuestrada por un asesino en serie, antes de que sea demasiado tarde. Es la base de Giallo, un film en el que título y género se mezclan, dirigido por el maestro del mismo, el gran (aunque últimamente de capa caida) Dario Argento.
Para esta ocasión, Argento tenía en sus manos un reparto internacional. Adrien Brody, Emmanuelle Seigner y Elsa Pataky parecían augurar unas ventas sencillas de la película. No ha sido así. Quizá haya sido mala suerte, o puede que tengan que ver las malas críticas que la película ha ido recogiendo allá donde se ha proyectado.
Ahora el film está a punto de estrenarse en Estados Unidos (directamente en DVD), pero hay alguien que intenta evitarlo: su protagonista. Y es que Brody parece que aún no ha visto un céntimo de lo que debería haber cobrado por hacer la película, que dice rodó por un engaño de los productores.